jueves, 24 de julio de 2014

ALOE SIEMPRE EN CASA



Buenos días a todos!!
Hoy quiero hablaros de la cantidad de propiedades saludables que tiene el Aloe vera, siempre y cuando su procedencia pueda garantizarnos su calidad. 


Esta planta ha sido usada en los campos de la medicina y la cosmética durante siglos. Antiguos registros muestran que las propiedades medicinales y las ventajas curativas del Aloe Vera, se conocen desde hace más de 5000 años.
Uno de sus limitantes ha sido su difícil conservación: el jugo de Aloe es  muy inestable y fácilmente oxidable, con lo que pierde sus propiedades terapéuticas si no se manipula con precaución.


¿Qué hace tan interesante a esta planta?

Pese a que numerosas investigaciones han intentado poner de manifiesto cual podría ser el principio responsable de las múltiples virtudes del Aloe Vera, se ha visto que es la sinergia de todos sus componentes la que lo convierte en uno de los productos con más aplicaciones terapéuticas en la actualidad.


De todos estos componentes debemos destacar la aloína. Es una antraquinonabastante irritante que ingerida pura, por vía oral, es un poderoso laxante y puede causar efectos secundarios como dolores intestinales, diarreas, espasmos e incluso cólicos.

Originariamente el Aloe era empleado como laxante por su riqueza en aloína, y por ello, se asoció rápidamente el Aloe a la aloína. Posteriormente, cuando empezó a utilizarse exclusivamente el gel de Aloe, en el que la aloína no se encuentra presente de forma significativa, se creó cierta confusión al respecto. El Aloe de consumo frecuente no debe sus propiedades a su contenido en aloína ya que la concentración de esta sustancia en el gel es prácticamente nula, sino al resto de la multitud de sustancias que la forman.


El Aloe vera presenta un elevado contenido en polisacáridos, biológicamente activos, que contribuyen a las propiedades cicatrizantes y inmunoestimuladoras de la planta. 







Color amarillento y un sabor ligeramente amargo, indicada presencia de ciertos componentes en la savia, pueden darnos inicialmente una impresión sobre la calidad de un Aloe. Un Aloe 100% puro tendrá una elevada riqueza en polisacáridos, variable en función del momento de recolección.

Zumo de Aloe debe obtenerse a partir de hojas enteras para asegurar una riqueza máxima en principios activos, mediante un proceso de extracción de primera presión en frío que asegure la no degradación de los mismos. Posteriormente debe someterse también a un proceso de filtrado para eliminar cualquier impureza, y asegurar la eliminación de sustancias, la aloína y la emodina.


Gel de Aloe se obtiene a partir del zumo añadiéndole un agente espesante llamado carragenano (componente de algunas algas y utilizado también en la industria alimentaria). Tanto el zumo como el gel, son igualmente efectivos si contienen el mismo porcentaje de Aloe vera. La mayor consistencia del gel lo hace de elección para su aplicación tópica, aunque también se puede beber perfectamente.


















Realizados el procesamiento del producto, su calidad viene confirmado por el Certificado de Cultivo Biológico.  Este certificado es otorgado por los organismos competentes en la materia de cada estado donde se produce el Aloe, debiendo renovarse cada año, garantiza el origen y la calidad de la materia prima (semillas biológicas, fertilizantes naturales, cosecha manual y extracción por primera presión frío).

La importancia del certificado de cultivo biológico en el Aloe Vera recae en el control de herbicidas, pesticidas u otros productos químicos, para que nunca sean  absorbidos por la planta y pasar a nuestro organismo cuando lo consumimos.

1 comentario: